Ciclos y Neurastenias en un mundo cruel

Día Internacional del Sabotaje


 

[Neurastenias]

 

 

Ya nadie se acuerda de esta fecha, pero durante muchos años, más que el 1º de mayo con sus aburridas manifestaciones, los que ibamos más allá celebrabamos el día anterior, o sea, el 30 de abril: Día Internacional del Sabotaje, instaurado por la corriente insurreccionalista anarquista italiana y secundada por todos los grupos ácratas de carácter autónomo y algunos grupos marxistas revolucionarios.

Esta noche en la plaza del Congreso de la capital, los docentes se habían concentrado para protestar contra la falta de acuerdo con sus demandas laborales y para montar una carpa educativa. No pudo realizarse esta medida, debido a las fuerzas policiales represoras que comenzaron por gasear a los presentes con gas pimienta y continuaron con golpes. Un increíble despliegue represivo que jamás justificaron en estas horas desde su deplorable actuación.

Recuerdo con especial cariño aquellas madrugadas en Murcia, cuando los extintos grupos La Caja de Pandora (anarquista, al cual yo pertenecía) y Juventudes Revolucionarias de la Región de Murcia (comunista) nos uníamos, a pesar de nuestras diferencias, y salíamos armados de sprays para pintar las fachadas de organismos oficiales e iglesias con nuestras proclamas, así como otras acciones que no voy a explicar, ya que serían motivo de requerimiento judicial. Lo pasábamos realmente bien, haciendo la noche y la ciudad nuestra, esquivando hábilmente a la polícia, con toda esa adrenalina concentrada, entre risas, juventud y muchas ganas de movernos y cambiar el estado de las cosas.

 

 

Tras pasar una etapa en Juventudes Libertarias y CNT, me incorporé a otro grupo ácrata autónomo, esta vez en Madrid: el Kolectivo Revolucionario Anarquista (KRA), célebre por sus acciones en la capital y por ser muy próximo a los postulados de acción directa que defendía el insurreccionalismo italiano. Con l@s compañer@s del KRA también reivindicábamos el 30-A, con pintadas, pancartas colocadas en lugares estratétijos (casi siempre prohibidos y con cierto riesgo de nuestra vida no alpinista) y otras acciones que no mencionaré por los mismos motivos que referí anteriormente.

Siempre guardo muy buenos recuerdos de aquellas noches arriesgadas y de la gente con la que compartí aquellos momentos. La Caja de Pandora fue una iniciación grupal muy intensa, donde reafirmar los ideales y decantarse por la acción directa. El KRA fue la confirmación de ese ideal. De hecho, dos de mis felinos más queridos se llamaron Kra (gato) y Pandora (gata).

Hoy ya no existen ninguno de los dos colectivos de gente joven con ganas de marcar la diferencia, pero los recuerdo con orgullo y cierta nostalgia también, sobre todo en unos tiempos donde estamos tan domesticados por el sistema y las tecnologías (puestas a nuestra disposición, previo pago, para tenernos dominados). Aquello sí eran ganas de luchar.

¡Espero que eso se revierta, y que la juventud se agrupe en colectivos funcionales revolucionarios que quieran cambiar el orden existente!

 

 

 

 

Una respuesta

  1. Pingback: Neurastenias (Artículos) | Ciclotimia Zondica

Deja un comentario